Montevideo, 14 dic (EFE).- El incendio forestal que se inició el pasado viernes en las proximidades del balneario uruguayo de Punta del Diablo comenzó a ceder hoy y se redujo la posibilidad de tener que evacuar la zona, informaron los bomberos.
"Hoy estamos bastante mejor que ayer, la tarea sigue pero básicamente atacando pequeños focos", señaló a Efe el inspector mayor Víctor Germán, director de incendios de la Dirección Nacional de Bomberos.
Para tratar de extinguir el incendio, que afectó cerca de 800 hectáreas de monte y bosque, hoy se sumaron a las tareas otros ochenta bomberos y seis aviones fumigadores de empresas privadas que decidieron colaborar con las autoridades.
En total unas 280 personas entre bomberos, militares y funcionarios municipales participan en las tareas de combate al fuego abriendo corta fuegos con maquinaria pesada, atacando las llamas con grandes mangueras de agua pero también pie a tierra con mochilas hídricas.
Las llamas que el martes generaron alarma porque debido a un cambio en la orientación de los vientos avanzaban hacia Punta del Diablo y llegaron hasta 4 kilómetros del balneario, volvieron a cambiar de rumbo.
La posibilidad de tener que evacuar a unas 1.500 personas que residen en Punta del Diablo "se redujo considerablemente", agregó German.
En la víspera el intendente del departamento de Rocha, Artigas Barrios, autoridades policiales y de bomberos se entrevistaron con los vecinos de la zona y les mencionaron la posibilidad de evacuación en el caso que las llamas siguieran avanzando rumbo al balneario.
Hasta ahora el incendio no afectó viviendas ni causó heridos.
La zona es de difícil acceso y la sequedad de los pastos debido a la falta de lluvia facilita la propagación de las llamas.
Punta del Diablo, que originalmente era un pueblo de pescadores, está ubicado a 300 kilómetros de Montevideo, con costas sobre el océano Atlántico y hace años se ha convertido en punto de reunión durante la temporada de playas, a punto de comenzar, de cientos de turistas locales y del exterior.
"Hoy estamos bastante mejor que ayer, la tarea sigue pero básicamente atacando pequeños focos", señaló a Efe el inspector mayor Víctor Germán, director de incendios de la Dirección Nacional de Bomberos.
Para tratar de extinguir el incendio, que afectó cerca de 800 hectáreas de monte y bosque, hoy se sumaron a las tareas otros ochenta bomberos y seis aviones fumigadores de empresas privadas que decidieron colaborar con las autoridades.
En total unas 280 personas entre bomberos, militares y funcionarios municipales participan en las tareas de combate al fuego abriendo corta fuegos con maquinaria pesada, atacando las llamas con grandes mangueras de agua pero también pie a tierra con mochilas hídricas.
Las llamas que el martes generaron alarma porque debido a un cambio en la orientación de los vientos avanzaban hacia Punta del Diablo y llegaron hasta 4 kilómetros del balneario, volvieron a cambiar de rumbo.
La posibilidad de tener que evacuar a unas 1.500 personas que residen en Punta del Diablo "se redujo considerablemente", agregó German.
En la víspera el intendente del departamento de Rocha, Artigas Barrios, autoridades policiales y de bomberos se entrevistaron con los vecinos de la zona y les mencionaron la posibilidad de evacuación en el caso que las llamas siguieran avanzando rumbo al balneario.
Hasta ahora el incendio no afectó viviendas ni causó heridos.
La zona es de difícil acceso y la sequedad de los pastos debido a la falta de lluvia facilita la propagación de las llamas.
Punta del Diablo, que originalmente era un pueblo de pescadores, está ubicado a 300 kilómetros de Montevideo, con costas sobre el océano Atlántico y hace años se ha convertido en punto de reunión durante la temporada de playas, a punto de comenzar, de cientos de turistas locales y del exterior.
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